Call of Duty: Black Ops 6 se enfrenta a importantes desafíos, según destacados YouTubers y jugadores competitivos. Una notable disminución en la participación de los jugadores ha llevado a algunos creadores de contenido a abandonar el juego por completo, mientras que los profesionales establecidos expresan un creciente descontento.
La leyenda de Call of Duty, OpTic Scump, afirma que la franquicia se encuentra en su peor estado y culpa principalmente al lanzamiento prematuro del modo clasificado. El ineficaz sistema antitrampas ha dado lugar a trampas desenfrenadas, lo que ha afectado gravemente al juego.
El streamer FaZe Swagg cambió dramáticamente a Marvel Rivals durante una transmisión en vivo, frustrado por los persistentes problemas de conectividad y la piratería generalizada. Su transmisión incluso incorporó un contador en vivo que rastrea los encuentros con piratas informáticos.
A los problemas se suma la importante debilitación del modo zombies, que dificulta la adquisición de máscaras de camuflaje deseables, junto con una abrumadora afluencia de artículos cosméticos. La crítica se centra en que Activision prioriza la monetización sobre mejoras sustanciales en el juego, un marcado contraste con los presupuestos previamente masivos de la franquicia. Esta situación, si bien es comprensible dadas las presiones financieras, plantea serias preocupaciones sobre la retención de jugadores. La paciencia de la comunidad se está agotando y el juego parece estar al borde de una coyuntura crítica.