El último título de Capcom, a pesar de lograr impresionantes recuentos de jugadores en línea (actualmente clasificados en el sexto lugar en la lista más jugada de Steam), se enfrenta a una reacción violenta significativa debido a su rendimiento técnico inferior en la PC. El análisis en profundidad de Digital Foundry corrobora estas críticas, revelando una multitud de problemas de rendimiento.
Sus pruebas destacan varios problemas clave. Los tiempos previos a la compilación del sombreador son excesivamente largos, que van desde aproximadamente 9 minutos en un sistema 9800X3D de alta gama hasta más de 30 minutos en un Ryzen 3600. La calidad de la textura es decepcionante, incluso en el entorno "alto", con deficiencias notables incluso en un RTX 4060 a una resolución de 1440p con DLSS equilibrado. Los picos de tiempo de marco son frecuentes, lo que impacta la suavidad, incluso en hardware más potente como un RTX 4070 (12 GB). La mala calidad de la textura persiste en varias configuraciones de GPU.
Para las GPU con 8 GB de VRAM, Digital Foundry recomienda reducir la calidad de la textura a "medio" para aliviar las tartamudeo y los picos de tiempo de marco. Sin embargo, incluso este compromiso da como resultado imágenes menos que ideales. Los movimientos rápidos de la cámara provocan constantemente gotas de marco notables, aunque menos severos con movimientos más lentos. Críticamente, los problemas de tiempo del marco central permanecen independientemente de la configuración de textura.
Alex Battaglia de Digital Foundry atribuye estos problemas a la transmisión de datos ineficiente, colocando una carga excesiva en la GPU durante la descompresión. Esto es particularmente perjudicial para las GPU presupuestarias, lo que lleva a puntas de tiempo de marco pronunciadas. Aconseja contra la compra del juego para aquellos con GPU de 8 GB y expresa reservas incluso para cartas más poderosas como el RTX 4070.
El rendimiento es especialmente pobre en las GPU de Intel, con el ARC 770 logrando solo 15-20 cuadros por segundo, acompañado de texturas faltantes y otros artefactos gráficos. Si bien los sistemas de alta gama pueden mitigar parcialmente estos problemas, el juego suave consistente sigue siendo difícil de alcanzar. Actualmente, la optimización de la configuración sin un sacrificio considerable en la fidelidad visual resulta casi imposible.